24 de abril de 2025 | Publica tus noticias | Todo el mundo cree en Dios cuando se menea el avión |
|
Ciclonautas. “La música está viviendo una época nefasta (…) Priorizan la inmediatez y la monetización por encima de la creación”Por Rubén Rozas. Fotos cortesía de El Dromedario Records Alen Ayerdi (Marea) y Mai Medina presentan el cuarto disco de la banda, ‘Ecdisis’Alen Ayerdi, batería de Marea y Mai Medina responden a Maneras de Vivir, ambos de vuelta en Ciclonautas, un proyecto que nada tiene que ver con lo que pudieran haber hecho anteriormente pero que, contra todo pronóstico -no pensaban pasar del segundo disco- acumulan ya cuatro trabajos. El último, Ecdisis, es un maremágnum de letras, sonidos y hasta productor absolutamente nuevo, pero que bebe de las fuentes ya exploradas por la propia banda y de los grupos que marcaron el camino. Es como entienden el rock. “Somos señores de otra época, pero bien orgullosos”, dicen entre risas para combatirla inmediatez que prima muchas veces en la música actual y todos los días en prácticamente cualquier ámbito. Y a eso suena Ciclonautas. A intensidad, pero calmada. A adrenalina y respiración profunda. A mudar la piel manteniendo la esencia. ¿Qué se va a encontrar la gente de novedoso en este trabajo? M: La esencia sigue siendo la misma. Seguimos siendo las mismas personas. Hay un punto de inflexión después del directo de Ciclogénesis y al trabajar con un productor nuevo (Adrián Vallejo-Estudios Musiikki) se nota una evolución en sonido. Operamos con mucha libertad y jugando. El proceso fue muy divertido porque se trata de un disco más reposado, con más tiempo para armarlo. “La industria empuja cada vez más a fijar plazos a cosas intangibles” Cuatro trabajos en diez-once años para algunos pueden ser mucho tiempo y pocos discos y para otros poco tiempo y muchos discos. ¿Cómo entendéis la música desde el punto de vista de la composición? A: Es muy complicado ponerle plazos a la creación. Nuestro reloj biológico funciona cuando Mariano tiene un montón de ideas. Ahí montamos un disco y en el momento en el que surge algo que creemos que funciona nos preparamos para grabar y, después, enseñárselo a todo el mundo; solo cuando estamos orgullosísimos de lo que hemos hecho. Es muy complicado porque todo se basa en que haya una creatividad que nos emocione. Es muy difícil ponerle plazos porque no es hacer churros ni tornillos. Puedes proponerte hacer una canción para el mes que viene y hacer dos o no hacer ninguna en medio año. Nunca lo sabes. Una pregunta típica que no siempre hago y que, en este caso, me parece oportuna. ¿Por qué este al disco? Ha llamado bastante la atención. M: Como decíamos antes, buscábamos un punto de inflexión del directo que habíamos sacado, por lo que el disco representa eso: un lienzo blanco para volver a crear cosas, pero con la experiencia de una década juntos. Y Ecdisis es eso, mudar de piel después de cumplir una etapa. ¿Notáis la diferencia cultural (hispano-argentina) en el proyecto creativo? La diversidad siempre enriquece. M: Ya nos conocemos más, apuntamos inconscientemente a una dirección en la que todos nos sabemos cómodos, pero al principio sí nos concebíamos más como un intercambio de ideas y referentes. ¿Por qué vuelve un grupo después de un parón? M: En mi caso porque hay canciones, pero puede haber otros: reencuentros, querer realizar conciertos puntuales… A nosotros nos unen las ideas y nos impulsan las ganas de hacer canciones nuevas. Cambio un poco la pregunta, ¿qué le hace a uno mantenerse en la música cuando has tocado techo? En tu caso Alen con Marea, entiendo que no es el éxito. Se me hace asimismo impensable que pudiera obedecer a motivos económicos, que sabéis que es algo con lo que siempre se especula con los regresos de los artistas… A: Todo lo que no es vocación es equivocación. Nunca he visto la música como un negocio, sino como algo con lo que transmitir y emocionar. Y el éxito es mantenerse en un proyecto difícil, hacer cuatro discos, seguir disfrutando de esto, sorprendiéndonos y que se nos pongan los pelos de punta al enseñarlo; no cortar más tickets ni vender más discos. Esto último simplemente es que le guste más a la gente. Y a la gente le puede gustar más algo porque le es más sencillo de interiorizar, no implica una mayor calidad. No me preocupa eso, sino que tengamos siempre buenas ideas, que cristalice en buenas canciones que emocionen y que eso nos dé la chispa suficiente para querérselo mostrar a todo el mundo. Estos son los motivos que ponen siempre la locomotora a funcionar. Repito: los plazos en la música deberían ser intangibles. M: A Alen le honra que teniendo una banda bien formada, exitosa y de enorme tirada se ponga a hacer un proyecto conmigo y Javier. Se nota que lleva muy metida la música, y yo soy consciente de que la música es un negocio en el que, si no hay respaldo no se podría vivir. Pero bueno, estamos festejando el cuarto disco cuando no sabíamos si iba a existir un segundo. La gente responde, lo pasamos bien en directo…Si dentro de este negocio nos podemos mantener, pueden contar conmigo. ¿Qué repercusión han tenido vuestros proyectos anteriores en Ciclonautas? Creo que la gente se confunde cuando un músico toma derroteros diferentes y esperan que suene igual que el grupo base, máxime cuando ha sido uno de los más grandes del rock nacional, como pasa aquí. A: De hecho, es todo lo contrario. Si ya estoy cultivando un estilo de rock en un grupo, que encima es el más grande, ¿qué sentido tiene que yo vaya a cultivar algo que ya cultivo con una banda? Yo me embarqué en este proyecto porque no tenía nada que ver con Marea. Es original, explora otros estilos muy diferentes del rock… Para mí es súper atractivo porque saca otro tipo de creatividad y me da la libertad de hacer otras cosas. Insisto, si ya toco en la mejor banda de rock urbano, ¿para qué voy a hacer otra banda de rock urbano para tocar lo mismo que ya toco en la primera y que encima es la más grande? No tiene sentido. Aquí hago cosas que no hago con Marea. “La música me ha salvado la vida” Alen, para preparar esta entrevista me he leído una entrevista muy interesante de El País en la que mostrabas tu lado más íntimo. Tu vida no ha sido un camino de rosas: enviudaste, criaste a un tu niño de año y medio, llevas cinco operaciones de corazón… ¿Cómo te ha influido tu vida personal en la profesional? A: La música me ha salvado la vida. En los momentos complicados, pasó como en la pandemia, que la música estaba ahí. Teníamos un montón de canciones en la cabeza y eso nos mantuvo la cabeza ocupada. Por muy mal que vayan las cosas, la música nunca te abandona. Una buena canción, una idea… te puede arreglar un día. Cualquier trabajo que estés desempeñando en el arte y te evada de una realidad dura… Y realmente es la vida. Yo tengo mis problemas, la familia de Mariano lo está pasando fatal en Argentina con la situación económica que hay allí, etc. Mis problemas no son más importantes que los de los demás. Todo el mundo tiene sus problemas, cada persona tiene que luchar las batallas que se le ponen delante (…) Ojalá la entrevista de El País ayude a la gente a no rendirse. Las situaciones más duras pueden sacar lo mejor de uno mismo, y esa resiliencia le da mucho sentido a todo. Creo que, si yo pude hacerlo, todo el mundo puede. A mí me pasaron esas cosas, pero a otro le diagnostican un cáncer, otro tiene un accidente y queda con una discapacidad… Pero hay que luchar e intentar seguir adelante. Es cierto que yo tuve cosas que me motivaban: un bebé al que sacar adelante, los proyectos musicales… En ese sentido lo he tenido más fácil. En este artículo hay una parte que dice Hoy es promotor, dueño de una discográfica y ‘manager’ de Robe y Marea. Su empresa es un oasis incómodo para un sector lleno de fondos de inversión. ¿En cuánto de jungla se ha convertido este sector? ¿Dónde residen las complicaciones principales? A: Pienso que es muy complicado para quien tenga dudas. Yo ahora no las tengo, porque ya he estado esclavizado en contratos jodidos mientras otros hacían lo que les daba la gana conmigo. Por eso hoy el sello, detrás del cual hay un equipo maravilloso que no quiero perder nunca. Que alguien te engañe va a servir para pisotearte y quitar un competidor. Y nosotros eso no. Nosotros trabajamos para el rock. Tenemos un equipo infalible que opera así y yo no tengo dudas (…) Entiendo que será difícil para quien las tenga, o tenga necesidad de crecer, quiera financiación para ser cada vez más grande… Nosotros no manejamos esas ambiciones. Nuestra ambición es invertir todo lo que ganemos en artistas nuevos, en dotar de oportunidades a gente con talento. En resumen, que no tengo ningún problema de los que tiene ahora la mayoría de la industria. Tú que has sido las dos personas, aunque ahora no seas un explotador (risas), ¿dirías que la industria es ahora más selva que antes? A: No… simplemente ha habido un cambio de política en el que creo que se está priorizando lo urgente en vez de dar tiempo a los creadores a hacer cosas imperecederas y que sirvan para siempre. Se está fomentando una industria que va a la inmediatez, a la monetización inmediata, a que en cuanto haya un artista que esté de moda lo metan en colaboraciones… Nos parece una cosa de usar y tirar. Nuestro concepto es que las carreras de los grandes artistas se consiguen dando tiempo al creador para que éste tenga el aliciente de hacer cosas que lleguen al alma. Voy en dirección absolutamente prohibida, pero no cambio lo de ahora por lo de antes. Estamos viviendo la época más nefasta, hasta el punto de que hay grupos que salen sin músicos a tocar. ¿Un grupo de punk que no lleva al batería porque se va de tiempo y gasta dinero en hotel? Para mí es inconcebible. Soy un señor de otra época, pero bien orgulloso (risas). Y más allá de esa época, que coincidimos en que fue la época dorada del rock español, ¿qué referentes actuales pueden tener los chavales? A: Igual que digo que estoy muy contento de que Ciclonautas nos sigamos reinventando y seamos, creo, ejemplo de resistencia mirando hacia los que encendieron la llama, si miro hacia delante encuentro bandas como Linaje o Cobardes que se han alimentado de nuestra trayectoria, como hicimos Marea en su día con Los Suaves o Extremoduro. Es la escena que ellos y nosotros vimos nacer respectivamente y que, como nos descuidemos, podemos ver morir. Y luego bandas como Rienda Suelta, con una escena que tenemos que potenciar. ¿Que no ha saltado a los grandes medios? Nos da igual. Marea tampoco estuvo la última gira en los grandes medios y ha llenado recintos increíbles. Nunca hemos sido importantes para los medios si nos comparamos con cualquier referencia de moda mucho más minoritaria. Hemos salido adelante sin los medios y, por tanto, no me preocupa. Venimos a atenderos a los que siempre habéis estado. M: Yo quiero añadir que la música sigue mientras haya niños y jóvenes dedicando su tiempo y pasión a un instrumento. “Llevamos a grupos que no han saltado a los grandes medios, pero nos da igual (…) Nunca hemos sido importantes para ellos. Atendemos a los que siempre habéis estado” ¿Qué planes tenéis en este 2025 y de cara a la posteridad? A: Ahora viene lo bueno. Estamos ya en la gira y vamos a disfrutar de ella, que tenemos más de 50 bolos este año entre Argentina y España. No miramos más allá. Mariano dice que ya tiene ideas nuevas, pero iremos montándolos a nuestro ritmo y dedicándole el tiempo necesario para mimar cada una de ellas pensando en la calidad.
|
![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() |
Licencia permisiva de Creative Commons | Aviso legal | Contacto | Facebook | Twitter | RSS Feed
Tecnología libre para un mundo libre. Manerasdevivir.com 1996-2025 |