
---------------------------------------------------------
?Puedo escribir los versos más tristes esta noche?
Es cierto, podría... pero, ¿Acaso quiero hacerlo? casi todas las canciones que recordamos son tristes, los mejores relatos parten de la tristeza, pero... ¿Por qué no escribir algo alegre? Acaso no diría lo mismo si ese poema empezase ?puedo escribir los versos más alegres esta noche? ciertamente no, nos habríamos dejado toda la melancolía por el camino...
Qué difícil es expresar cuando algo va bien, cuando sonreimos, ¿Por qué entonces no tenemos ganas de escribirlo? entonces, no nos dejamos llevar por un papel en blanco, no nos mecemos en nuestros silencios, salimos, reimos y lo gritamos a los cuatro vientos.
Gritamos mientras decimos un ?te quiero?, nos brillan los ojos cuando vemos a esa persona, que nos hace feliz, y entonces, ni siquiera nos acordamos de escribirlo, porque no hay tiempo y solo queremos exprimir esas horas, minutos, días, años o vida junto a él...
Abrazamos las mañanas con nuevas sensaciones y sentimientos, abrazamos las horas que quedan para verle, pensando que todo tiempo sin él es eterno, esperando sentir sus labios, y por las noches, auque estés sola no sientes esa soledad sin él, sabes que en algún lugar el está pensando en ti, recordandote, que ocupas una parte, aunque sea pequeña de su mente...
Entonces sonríes, no hace falta más, ni pensar, ni recordar, ni llorar, ni ver que estás sola...
Tus ojos, ya sin lágrimas te permiten ver un mundo más real, sin sumirse en el llanto, ni la tristeza, ni la soledad, tampoco en el anhelo.
Y no, no voy a escribir los versos más tristes esta noche, no voy a escribirlos aún sabiendo que en ellos está la magia, la melancolía, aún sabiendo que triste llega al corazón.
Escribiré pues, que aún se eriza mi piel recordándote, que aún siento el sabor en mis labios que se quedó la última vez que te besé, que aún sueño cada noche contigo, no bajo el recuerdo, o la tristeza, no bajo la soledad, si no sabiendo que mañana te volveré a besar, que tus manos rozarán mi piel hasta hacer que un escalofrío me recorra.
Sabiendo... que tu estás aquí conmigo, aunque no estés, sabiendo que piensas en mí, sabiendo que sonríes para mí aunque no pueda verte...
Sabiendo que has robado mis tristeza para dibujar en su lugar mil sonrisas...
En la misma oscuridad que ayer me hacía sentir sola, ahora con un brillo en los ojos recuperado, he de decir, que no, no puedo escribir los versos más tristes esta noche...