sin tantos miedos y frenos
Por dejarme caer, colina abajo
donde tal vez no me esperes
Buscarte entre los despertadores
cuando a tientas saboreo
los ultimos momentos de sueño
donde todo esta a mi alcance
Esperar sentado, mirando como cae
la febril lluvia de mayo
sobre la envejecida acera
tantas veces pisada
Lo que daria por estar alli
sin tapujos ni rodeos
embarcarme en el tren del deseo
sin llegar a ninguna parada
Esta gota que resbala por la ventana
persigo atento por si me habla
Se esconde en el marco
dejando el surco de una lagrima
La lagrima que cayo
lentamente en la mañana
El reloj me ha impedido
besarte desde la cama
No ansio abrir los ojos
ni recuperar la conciencia perdida
entre el vergel de tu sonrisa
aguardare al invierno.
