Entrevista a Burning. Rock al filo de la navaja

Abril de 2017. Una entrevista de Kike Babas y Kike Turrón

En estado de gracia y sostenibilidad permanente mantiene Johnny a sus Burning, ahora inmersos en medio de una nueva gira llamada como uno de sus temas recientes “Corre conmigo”. Con un tesón a prueba de pico y pala y una candorosa ilusión que hace olvidar que son más de 40 años y varios resurgimientos lo que la banda atesora en su dilatada trayectoria.

En el escenario a Johnny le acompaña el line-up habitual de la última época: Kacho Casal a la batería, Carlos Guardado al bajo, Eduardo Pinilla y Nico Álvarez a las guitarras y Maikol Slingluff al saxo. Ellos son los representantes actuales de la esencial banda nacida en Madrid en 1974 y que entonces capitaneaban los ya desparecidos -por obra y gracia del puro vicio- Pepe Risi (guitarra) y Toño Martín (voz) con el indeleble Johnny salvaguardando los teclados.

Desde entonces Burning se ha revelado como una corriente en si misma dentro del rock urbano español, responsables primigenios de la normalización del castellano en el idioma del rock y autores de algunas de las canciones más imperecederas que el género ha dado de sí, que mantiene un fino y mágico equilibrio entre el lado salvaje y vulnerable de la vida. Una biografía llena de cicatrices, truculenta, que felizmente ha encontrado un hueco definitivo en el presente y goza de un saludable e inmediato futuro. Hablamos con Johnny Cifuentes.

Burning está embarcado en estos meses primaverales en la gira “Corre conmigo”.

De primeras tengo que agradecérselo enormemente y de corazón a la productora, a Honey Dripper, dos chavales jóvenes que tenían sus negocios de hostelería y que apuestan por el rock and roll. Son unos enamorados del rock and roll que decidieron juntarse en la aventura de promocionar bandas, de traer gente estupenda y sabrosa. Ellos son fans, se venían a muchos conciertos y se les ocurrió hacer 15 ciudades con Burning a lo largo de toda España. Salió el título: “Corre, conmigo”, que tiene que ver mucho con la carretera y las últimas canciones de Burning. Así que estoy una vez más saboreando furgonetas, ciudades, música, gente nueva, escenarios y pasión. E intentando entre bolo y bolo escribir algún verso para un próximo disco, estoy muy atareado.

En esta gira vais la formación eléctrica habitual, aunque en los últimos tiempos habéis llevado en ocasiones coros y sección de vientos, algo que te encanta.

Como lo sabes Kike, pero cada concierto es diferente. No sé qué ocurrirá, pues mola mucho tener en cartera a amigos que has ido haciendo por la carretera: como es esa sección de vientos, esas chicas a los coros, la percusión. Yo cuando veo conciertos grandes de, por ejemplo, Los Stones, de los cuales soy un enamorado, miro ese trío de metales: con el Bobby Keys, el Jim Price, son gente que adornan las canciones, algo que siempre me enamoró. De hecho hasta que no lo conseguí, no paré. Contamos con esos coros divinos, con dos chicas que lo hacen estupendamente y me ayudan subiendo la voz. Pero a veces me gusta dar conciertos más desnudos, depende del momento. Sea como sea siempre daremos lo mejor que tenemos, ese es el secreto de Burning: el rollo auténtico de toda la vida que gusta a los burnianos, eso es lo que nos hace sobrevivir.

Os acompañan la banda madrileña Desvariados y se sumaran en el Festival Cultura Inquieta de Getafe Los Zigarros.

Yo que sé, yo creo que la salud del rock, de este rock al filo de la navaja, está muy bien, y veo que cada día hay más grupos que de alguna manera siguen nuestros pasos como nosotros seguimos a nuestros antecesores (aprovecho para despedir y dar un abrazo a mi abuelo Chuck Berry, un referente para toda la gente que hacemos este tipo de música), y así van saliendo grupos de esos ensayos que apuestan por este tipo de música. Es una oportunidad que alguien te diga vas a hacer una gira de 15 bolos con Burning. Creo que toda la gente que viene a ver a Burning verán que este grupo, Desvariados, tiene una honda muy fresca, es el futuro. Los Zigarros son una realidad actual, grupo salvaje, estupendo, tocamos mucho con ellos, es gente maravillosa con grandes canciones. Tienen una puesta en escena maravillosa, yo soy de los que bajo a verlos, igual que ellos a nosotros, y luego nos visitamos en el camerino y todo eso. Lo digo siempre: la próxima estrella del rock and roll está ahora mismo en un local de ensayo rompiéndose los dedos para sacar un acorde y ponerle un verso. Esto es así.

Aprovechando que esta entrevista es sobre vuestra nueva gira hablemos de los directos que Burning ha grabado en su vida. El último, sin contar la participación en el “Rocktiembre”, es “Vivo y salvaje” (2016) grabado en el Pabellón de los Deportes de Madrid.

De alguna manera cumplíamos años, cuatro décadas. Madrid es la ciudad que nos ha visto nacer y es como cuando sale el Atleti al Calderón, no hace falta ir de exigente con uno mismo, basta con echar esa sonrisa y están todos esos burnianos con sus amigos, familiares e hijos, siempre es un placer. A Madrid la tratamos siempre como nuestra madre o novia. Para los ensayos con todos los invitados podríamos haberlo hecho en otro sitio, pero por Infra-estructura lo hicimos en Madrid, y me llevé la sorpresa de que casi la mitad de las 10.000 personas venían de fuera. Un disco que prueba una vez más el estado de forma de la banda y el estado del cariño que nos tienen muchísimos coetáneos y compañeros de viaje. Encima están 10 o 12 invitados que para mi son de lo mejorcito, grandes estrellas: Josele Santiago, Álvaro Urquijo, Bunbury, Carlos Tarque, etc…

Antes fue “Desnudo en el Joy” (2008), un directo en formato semi-acústico.

En principio nos resultaba curioso, porque la Joy era un sitio donde estábamos acostumbrados a no poder pasar, quién no había sufrido en sus carnes aquello de: “Usted no puede pasar”. En la Joy llevaban ese rollo hasta que comprobaron que podían hacer un doble negocio: dar conciertos y luego abrir para las criaturas divertidas. Se nos ocurrió hacer el disco al lado de La Puerta del Sol, en aquella estábamos sumergidos en la onda acústica: guitarras acústicas, sección de cuerdas, todo muy suave. Una vez más en este disco tuvimos unas colaboraciones para la eternidad. Al final quedan canciones que dices ¡qué bien que lo hayamos hecho! por ejemplo el “Jim Dinamita” con acústica, que yo pensaba que no iba a funcionar y fue una de los mejores. Burning en su estado más suave.

El primero de todos vuestros discos en vivo fue “Directo”, grabado en Madrid en el 91 y con Pepe Risi vivito y coleando.

Pues sí, echas la mirada atrás y de aquella alineación ha habido varias bajas, es lo primero que me viene a la mente al pensar en este disco, la parte mas dura. Por otro lado pienso que se trata de los primeros discos en los que hubo tanta participación, tanta fiesta, tanta colaboración en las canciones, si el disco tiene veintitantas canciones, hay 17 o 18 colaboradores. En la banda estaba nuestro querido Risi, y en aquellos camerinos juntamos Enrique Urquijo, Antonio Vega, Rosendo, El Loco, Sabina, Miguel Ríos, en fin, la hostia. Lo recuerdo bien, vendimos mogollón, a partir de ahí Burning saltamos a las plazas de toros y tuvimos dos años de gira interminable y vinieron discos maravillosos como “No mires atrás,” aquello fue subir un escalón o dos gracias a ese disco. Grandes recuerdos, quitando la parte dura.

Supongo que los desaparecidos Pepe Risi o Toño podrían estar orgullosos de ti, has mantenido al alza la leyenda.

No lo sé. Ellos se fueron y no estoy preocupado, su vida estuvo llena de cosas, de las muchas cosas que les ocurrieron. Han pasado los años y yo sigo haciendo lo que me sale del corazón. Lo cierto es que no he cambiado tanto desde que curraba en la cooperativa del taxi hasta ahora, y sigo participando de la vida callejera y familiar, de mi furgo, mis discos y mi piano, eso forma mi vida.