Txus: “Mägo de Oz estará hasta que la dignidad aguante”

Por Rubén Rozas

Mägo de Oz vuelve a escena con Bandera negra, un disco que se suma a sus 14 trabajos anteriores y lo mantiene como uno de los grupos españoles más laureados a nivel nacional e internacional. Al menos eso pronostica el recibimiento por parte de sus seguidores de los tres singles de adelanto: Tu madre es una cabra (con La Pegatina), El cervezo (el árbol de la birra) y Bandera negra, pues el disco no verá la luz hasta septiembre.

Hablamos con Txus di Fellatio, batería y fundador del grupo, y Víctor de Andrés, desde el año pasado nuevo guitarrista de la banda. Ambos analizan el que para ellos es un disco que mezcla pasado y presente-futuro de Mägo durante una entrevista que da para hablar de muchas cosas además de música. La pandemia, los negacionistas e, incluso, la eutanasia, tema principal de una de sus nuevas canciones, son algunas de las cuestiones que “se abordan” en esta conversación. (Responde Txus si no se indica lo contrario).

¿Por qué decidís sacar este disco ahora?

Estábamos de gira en Estados Unidos, la primera que hacía con nosotros Víctor, y al octavo concierto nos llaman y nos dicen que tenemos que volver a España porque se cierra. Cuando aterrizamos Madrid estaba desierto, parecía la peli de Soy leyenda, y dijimos: “¿Qué ha pasado?”, porque en Estados Unidos todavía no se lo terminaban de creer..

Cuando llego a mi casa me explican que no se puede salir y demás y con las mismas llamo a Moha y le propongo componer un disco. Su primera respuesta fue: “¿No jodas?”, y yo: “Claro tío, con guitarrista nuevo y todo, que le den por culo al Apocalipsis. Pero que sea un disco divertido”. Y ya me dijo: “Venga, vale”.

Esa fue la razón. Queríamos hacer un disco que no fuera una continuidad de los anteriores. De hecho, este trabajo tiene un pie puesto en el pasado y otro en el presente-futuro. Hay cosas de los Mägo de toda la vida y otras que dices: “Qué guitarras más heavys”; o: “¿Y esto?”.

La intención era que saliera algo de Mägo tal y como éramos en ese momento y qué mejor forma de presentar a Víctor que con canciones que él defiende. De hecho, hay mucha participación suya.

“Este trabajo tiene un pie puesto en el pasado y otro en el presente-futuro”

De los tres singles que habéis enseñado hasta el momento, habéis calificado Tu madre es una cabra y El cervezo (el árbol de la birra) como más “comerciales”, mientras que Bandera Negra toma otros derroteros. ¿Cómo definís el trabajo en su conjunto?

Si tengo que poner un ejemplo al fan de Mägo le diría que es más parecido a Finisterra que a Gaia. En el primero había canciones de todo tipo como Polla dura no cree en Dios o El señor de los gramillos, porque además la letra de esa canción es una gilipollez y mucha gente cuando escucha Tu madre es una cabra piensa lo mismo. Y lo es, pero como muchas otras nuestras que antes tenían mucho éxito y ahora no gustan tanto (a algunos).

Bandera Negra es todo lo contrario. Dura ocho minutos, es el típico tema de Mägo que intentamos que no sea comercial.

Al margen de esto, yo siempre intento que los singles sean comerciales. Para mi es una virtud que una canción sea comercial. Hay gente que lo ve como algo malo, pero yo lo veo como algo que se vende y que la gente consume.

Nosotros somos un grupo comercial. Vamos a ser realistas, si nos tenemos que comparar nos parecemos más a Bon Jovi que a Slayer. Somos la parte amable del metal. Mucha gente empieza en el heavy por Mägo y luego se mantiene en él o se pasa al black metal por otros grupos y se pone su camiseta de In Flames.

Este disco, en definitiva, es un poco la reivindicación de lo antiguo con lo nuevo. Pero está todo hecho a posta. La intro, por ejemplo, es muy de La leyenda de La Mancha, muy sencillita pero con mucha guitarra muy potentes y diferente a lo que veníamos haciendo últimamente. Aquí de nuevo tiene mucho que ver Víctor.

Hay varios temas, La dama del mar, La vida pirata y Al abordaje, muy ligados con el mar, incluso la intro y la portada. ¿Es el recurso principal del disco?

El tópico típico para hablar de piratas es muy limitado y dentro de eso el mar te da un poco más de vida. No obstante, hemos intentado hacer un disco que no sea conceptual. Es decir, el disco no habla solo del mar o de piratas, aunque hay algunas canciones que sí le tienen como nexo común. Pero sí, el mar aparece; a nosotros nos gusta mucho y lo concebimos como lo más inexplorado del planeta.

En cualquier caso, en gran parte de vuestras composiciones hay referencias naturales. En relación a esto y, perdón si no es una cuestión estrictamente musical, ¿qué opináis de los que niegan el cambio climático, por ejemplo o, sin ir más lejos, el covid?

Yo por principios respeto toda opinión, incluso las que no se sostienen en una lógica. Ahora bien, escucho a gente como Miguel Bosé, Victoria Abril o, incluso, amigos que quiero muchísimo como Alberto Rionda y les digo: “¿Cómo que la tierra es plana?”.

Me parece que la opinión del negacionismo y de que nos quieran controlar y no se qué está de puta madre para Cuarto Milenio, pero me parece una irresponsabilidad en una pandemia soltar ciertas afirmaciones que no están basadas en la lógica sin ser un experto. Yo lo respeto y no quiero censurar a nadie, pero me parece cuanto menos una frivolidad.

Víctor: Tenga una base de razón o no, la gente se está muriendo, y eso es un hecho. Vamos a poner un poco los puntos sobre las íes en ese aspecto.

Txus: Claro, imagino que cuando una madre ha perdido a su hijo de 35 años por el covid y está oyendo esas cosas no le hace gracia. Aún así yo no prohibiría que los negacionistas expresen su opinión, porque odio que se prohíba a la gente expresar sus ideas; pero para mí son cuatro “chalados”, entre comillas.

Aparte de esto, creo que hay tantas cosas en la vida a las que aferrarse, que estar pendiente de que si nos quieren controlar con microchips, con la vacuna… es de aburrirse mucho.

“Me parece una irresponsabilidad en una pandemia soltar ciertas afirmaciones que no están basadas en la lógica sin ser un experto”

Hay un tema, Quiero que apagues mi luz, que trata sobre la eutanasia. ¿Cómo surge la idea?

Compuse la letra –la música la trajo Josema y entre todos se la estropeamos un poco (risas)- hace muchísimo tiempo viendo la noticia del matrimonio en el que el marido ayuda a morir a su mujer y para el que pedían pena de cárcel.

Me pareció tan espeluznante, lo primero le experiencia vital que tuvo que vivir ese hombre, y lo segundo lo injusta que es parte de la sociedad. Cuando vi la noticia, además, la mujer estaba encogida con un rictus horrible y él la acariciaba con un cariño… y había detrás de ellos una foto preciosa; pero a mí me pareció más bonita la realidad que la foto, porque el amor que vi en ese momento es el de querer muchísimo a una persona.

La canción va de eso. De hecho el protagonista termina en la cárcel abrazado a una foto de su mujer… Es una letra para hacer pensar. Yo estoy a favor de la eutanasia y creo que el estar vivo no es solo respirar. A mí me gustaría elegir cómo irme, y si tengo una enfermedad terminal imagino que llegado un momento diría: “Hasta aquí”. Esto lo pienso ahora, luego es verdad que nuestro instinto de supervivencia es muy fuerte, pero es indigno que una persona termine así cuando no lo hacemos con un animal.

Evidentemente, las asociaciones religiosas y demás están en contra. Yo creo que incumplen su primer mandato y que es muy egoísta, pero cada uno…Me pasa igual que con los negacionistas, en su caso entiendo que tengan la postura de “hasta que Dios diga”, pero creo que es alargar un dolor innecesario a la persona que amas.

Entre los temas pura esencia Mägo de Oz y más fiesteros destaca Resacoxis en pandemia. ¿Qué me decís de él?

Fue Moha quien trajo el estribillo, que era: “Un, dos, tres, cuatro jarras de cerveza...”, y le dije: “Ya se por dónde vas” (risas).

He de reconocer que no me gusta la cerveza, aunque escriba mucho sobre ella. Muchos dirán que soy un hipócrita, pero no, soy escritor-músico. Quiero decir, Stephen King no es un asesino en serie y escribe novelas de terror.

Este en concreto es un tema muy punky. A Zeta le hicimos cantar súper ronco y hay apoyos que le hago yo porque él estaba asfixiado y en directo -porque esta canción Moha la va a querer tocar en directo- no iba a poder.

La letra habla de todo lo que pasó cualquier persona durante el encierro: la suegra en casa, mil series a cada cual más mala, todos a hacer gimnasia, a hacer pan… y las ganas de que abrieran un bar y salir con los amigos a beberse hasta el agua de los charcos. La letra es un poco tonta pero todo el mundo se va a identificar con ella.

¿Qué otra/s canción/es destacáis?

A mí me gusta mucho Al abordaje, porque es un tema muy novedoso, que va muy rápido pero es distinto, más Judas Priest que Helloween. Se nota que ha metido mano un señor que no tiene los vicios que teníamos los demás compositores.

Nunca te fallaré también me gusta mucho y La dama del mar, que es el próximo single. De hecho, este iba a serlo antes que El cervezo, pero me ganó parte del grupo para que lo fuera alguno divertido.

Aprovechando la canción anterior. ¿Cómo ha afectado la pandemia al grupo?

Creo que nos ha afectado como personas. Cada uno nos hemos dado cuenta de lo que es importante en la vida y lo que no. Lo importante es ahora tu familia, que estés bien, la salud, dar un abrazo como si mañana nos fueran a confinar… los abrazos curan; y todo esto es algo de lo que nos hemos dado cuenta al perderlo. Yo como persona he cambiado, y creo que si esto no te ha cambiado eres una piedra.

Como grupo ha servido para hacer una pausa, porque llevábamos un ritmo de disco, gira, disco, gira importante.

No vamos a dar ningún concierto mientras esté la pandemia, porque creemos que así no se disfruta el rock; sí la canción de autor o el jazz. No me imagino un concierto de ACDC sentado. Respeto y entiendo que haya bandas que lo hagan porque necesiten pagar el local o el disco, pero nosotros nos lo podemos permitir y queremos salir como Dios manda.

“No vamos a dar ningún concierto mientras esté la pandemia”

¿Afirmaríais que el covid ha hecho más daño a los grupos pequeños que a los grandes?

Víctor: Yo creo que cada situación es distinta.

Txus: Yo creo que ha hecho más daño a los grupos grandes porque la infraestructura que tienen Beyoncé o Iron Maiden es tan grande que si hacen por ejemplo un acústico tienen que elegir con qué guitarrista o dejar al jefe fuera… Es como un Mercedes, si te gusta es esto, no te puedo sacar uno que cueste 12.000€.

Las bandas grandes tienen muchos beneficios, pero también muchos gastos. Quiero decir con esto, que no se me malinterprete y lo digo con todos mis respetos, hay bandas que iban a meter a 150 personas con pandemia o sin ella.

Víctor: Hace más daño al que lo tiene como sistema de vida.

Txus: A eso voy. En el grupo pequeño cada uno trabaja en una cosa y la música para ellos es un hobbie, a veces remunerado y a veces les cuesta dinero, pero nosotros vivimos de la música y llevamos un año y medio sin poder facturar.

Pero todo pasa por algo. Por sacarle un lado positivo, a lo mejor el planeta debía parar y era necesario que lo hiciera y que nos diéramos cuenta de ello.

En este disco contáis con tres colaboraciones: La Pegatina, Carlos Escobedo (Sôber) y Saurom. ¿Cómo ha sido colaborar con ellos?

Con Carlos Escobedo, como siempre un honor. Es un habitual en colabos porque me encanta como compone, su voz… y somos amigos desde hace muchísimos años.

En esta ocasión le pedí una canción heavy pensando en Mägo y le costó porque hacía mucho que no componía heavy. Estuvo a punto de mandarme a tomar por culo, pero lo terminó agradeciendo y le acabó gustando el resultado.

Respecto a La Pegatina, hicimos el ska, que está compuesto desde La ciudad de los árboles, pero no había cojones a sacarlo porque no nos hablábamos casi, había mucha competición de a ver quien hacía más canciones… y no era el momento. Y ahora sí tocaba hacer lo que nos diera la gana y necesitábamos metales.

La primera banda que se no vino a la cabeza fue Ska-P, que son muy buenos amigos; pero era muy obvio y desde Warner nos recomendaron a La Pegatina.

Yo había oído hablar de ellos como había oído hablar de La Raíz, pero cuando vi Maricarmen en directo con 90.000 personas de todo tipo me pareció una pasada. Les llamamos y nos lo pasamos muy bien con ellos. Son gente encantadora y, además, dos son muy seguidores de Mägo.

Y con Saurom me apetecía hacer cosas. Nunca habíamos colaborado ni tocado en directo juntos. Se decía por ahí, incluso, que había piques entre nosotros y lo quise cortar de raíz. Ambas partes encantadas y ellos encantadores. Una pedazo de banda.

¿Haréis gira por otros países?

En España no vamos a tocar hasta 2022, pero en Estados Unidos –porque allí está más abiertos el tema de los conciertos- arrancamos el 12 de octubre con 16-17 bolos, el 20 de noviembre bajamos a Ciudad de México con Saurom y de ahí nos vamos a Latinoamérica. Recorreremos Ecuador, Colombia, Costa Rica... hasta el 21 de diciembre con un total de 40 y tantas noches.

En enero-febrero seguiremos por México y en España haremos conciertos de cara a abril.

[Mägo de oz ya han anunciado un concierto para abril de 2022 en Madrid. Entradas a la venta en este enlace de Wegow]

Un mensaje para convencer a la gente de que la cultura es segura

Víctor: La cultura es segura si se toman las medidas. Quiero decir, lo lógico es que si tú vas a un concierto tomes las medidas que te dicen las autoridades sanitarias, si lo haces es 100% seguro, como lo es un mitin político o un partido de fútbol. ¿Por qué no lo va a ser?

Txus: La cultura es la hostelería del alma. Es necesaria. A mí estos eslóganes prefabricados de ‘La cultura es segura, pero no puedes tocar en ningún sitio’ y, en cambio, puedes ir en el Metro, no me convencen. No creo en los eslóganes que marcan los políticos. Las normas están llenas de contradicciones.

El otro día se criticaba que los aficionados del Atleti salieran a la calle cuando los mismos que lo hacen celebran la victoria de Ayuso en la calle o acuden a una manifestación en Colón. Por eso no me gusta dar eslóganes que salgan de los políticos como ‘La cultura es segura’. La cultura es necesaria y nadie puede vivir sin ella.

“No me gusta dar eslóganes que salgan de los políticos como ‘La cultura es segura’. La cultura es necesaria”

Habéis tenido bastantes cambios en la formación a lo largo de los años. Sin embargo, esto no os ha impedido manteneros arriba. ¿En qué creéis que se basa vuestro éxito o, mejor dicho, vuestra continuidad?

Yo no creo ni en el éxito ni el fracaso. Sí creo en el trabajo y en la suerte; porque tienes que gustar a la gente. Esto es muy subjetivo: puedes ser bueno y no gustar a la gente y ser una puta mierda y gustar a muchos, como las hamburguesas del Mc Donald (risas). Pero es así, es muy subjetivo. El éxito es la marca. Si mañana se va el payaso del McDonald, la marca seguirá.

Pues en Mägo pasa algo parecido. Da igual quien esté si la marca se mantiene. Sucede igual que con el fútbol, hay equipos como el Barça o el Madrid que tienen un estilo de juego innegociable más allá de los jugadores que estén y a quien le guste bien y a quien no, no.

Tú escuchas este disco y no puedes negar que somos Mägo de Oz, porque esta forma de hacer canciones la hemos inventado nosotros. Mientras seas honesto y mantengas la fórmula sin repetirte o intentándolo el proyecto funcionará. De hecho, a veces los cambios son necesarios porque entran puntos de vista nuevos. Gente que desde fuera ve aciertos y errores que tú no ves; y una vez dentro te enriquece.

Si en Mägo de Oz no hubiera habido ningún cambio habría desaparecido después de Gaia III. Es verdad que estamos en la segunda parte del partido: 50 años, 14 discos… y no me gustaría llegar a los penaltis. Me gustaría que el día que lo dejáramos fuera con dignidad.

Habrá a quien le gustara más la formación de antes que la de ahora, y eso es lo bonito. Yo no reniego de nadie que haya pasado por aquí porque somos lo que somos también gracias a ellos. Todos los músicos cuando pasan por un grupo se dejan en él una parte de su alma.

Opiniones de cada persona aparte, seguimos ahí: recibimos millones de visualizaciones, llenamos sitios… eso son cuestiones objetivas y estamos contentos con nuestro trabajo.

“Si en Mägo de Oz no hubiera habido ningún cambio habría desaparecido después de Gaia III”

Víctor: Visto desde fuera como fan, que lo soy desde que era un chaval; Mägo ha tenido una evolución muy lógica y siempre ha demostrado que todo lo que hacia molaba. Yo creo que la suerte existe, pero te tiene que pillar trabajando; y visto desde dentro la banda no deja de trabajar.

Txus: Por supuesto, pero hay gente que trabaja y no pasa de su primera maqueta. Quiero decir, no solo el trabajo es suficiente. Hace falta un poco de todo.

Tenéis una canción que está por encima de cualquier disco y que es un himno de nuestra música, Fiesta pagana. ¿Cuál es su historia?

Fiesta pagana se compuso terminado Finisterra. Yo salía de la antigua tienda de Gran Vía, Madrid Records, de comprarme unos discos y se me vino a la cabeza una melodía.

Por aquella época llevaba una grabadora y ese día no la llevaba. Llamé desde una cabina a casa sabiendo que mi madre estaba trabajando y dejé en el contestador la melodía.

A la semana ya ni me acordaba y me dijo mi madre: “Oye Txus, han dejado ahí una melodía. Debe ser algún amigo tuyo borracho” (risas) y ya caí. Me gustó y puse la grabadora.

A la semana dije: “Tenemos que incluir esta canción”. Al principio me dijeron que no porque el disco era ya muy largo, pero les encantó y al final la metimos.

Es el claro ejemplo de que los éxitos (en forma de canción) a veces no se buscan, te encuentran.

¿Mägo de Oz estará hasta que el cuerpo aguante?

Hasta que la dignidad aguante. A mí, aunque parezca una contradicción, me da mucho miedo el ridículo y, a veces, veo a compañeros –no voy a decir nombres- y pienso que deberían dejarlo.

Me pasa lo mismo con Elton John, David Coverdale… no les hace falta seguir y yo les quiero recordar como lo que han sido. Esto se puede extrapolar a futbolistas, etc.

Yo entiendo que es muy difícil despedirte de un aplauso y pasar a una vida anónima. Pero creo que te tienes que rodear de gente que te recomiende dejarlo llegado el momento, porque al final la vida son etapas.

Además es que nuestra música es así. En el caso de Raphael, él puede seguir el tiempo que le de la gana porque hace canción ligera con su traje; pero señores con mallas pegando saltos con dragones atrás, con espadas, diciendo: “Jóvenes por la eternidad’… Yo no quiero hacer eso.

A lo mejor el cuerpo aguanta, pero para hacer otra cosa. Siempre digo que quiero retirarme en un hotel de Roquetas de Mar y tocar canciones para alemanas de 60 años. Lo tengo apalabrado con Víctor (risas).

No, en serio, la vida son etapas y yo quiero terminar cuando crea que ha llegado el momento.